TRADICIONES

Fundaciones y traslados marcan la historia de Ciudad Bolívar

#Aniversario251 de Ciudad Bolívar
#Aniversario251 de Ciudad Bolívar

Texto: María Alejandra Pasarella A.
Fotos: Clement Díaz

El progreso de un pueblo se puede medir a través de la identidad que tengan quienes lo habitan en relación con las costumbres, tradiciones y hechos históricos que, de manera común, los conecte a todos a una misma realidad.
Para quienes nacimos y vivimos en Ciudad Bolívar no es secreto que poco es lo que, en realidad, conocemos de nuestra historia, de nuestro origen. En sí, poco sabemos de nuestros ancestros, de quiénes habitaron por primera vez las tierras que hoy nos sirven de hogar.
Hay poco material bibliográfico, pocas investigaciones y lo que se ha hecho, ya fue hace tanto tiempo, que es sumamente complicado conseguir escritos, datos o testimonios que contribuyan con el fortalecimiento de nuestras raíces, de lo que en esencia, somos como ciudadanos bolivarenses.
A mis manos llegaron dos textos, de suma relevancia y que deberían ser reimpresos, pues contienen todos los datos para hacer una correcta cédula de identidad de Ciudad Bolívar.
Me refiero a la obra “Anales de Guayana”, escrito por B. Tavera Acosta y publicado por primera vez en 1913; y al texto “Fundación de Angostura en 1764 por el Coronel Joaquín Sabas Moreno de Mendoza”, escrito por el Hno. Nectario María, como parte de las actividades realizadas para la celebración del Bicentenario de la fundación de la ciudad en 1964.
Basándome en los estudios y datos recopilados por estos significativos estudiosos y escritores de la región, intentaré contar, el palabras sencillas, algunos aspectos de la Fundación de Ciudad Bolívar y de cómo y porqué hoy celebramos sus 251 años.

Bicentenario desorientado
Para 1964, año en que se cumplía el bicentenario de la fundación de Ciudad Bolívar, aún existía desconocimiento y confusión con respecto a la verdadera fecha de la fundación de la ciudad. Según se refleja en el texto “Fundación de Angostura en 1764 por el Coronel Joaquín Sabas Moreno de Mendoza”, para la época, el estudio más completo lo había realizado B. Tavera Acosta en “Anales de Guayana” y allí se indicaba que era imposible determinar la fecha exacta, pues durante el estudio no se habían encontrado documentos que pudieran indicar, una fecha oficial.
Había quienes señalaban que la fundación se concretó el 19 de Febrero de 1764 y había otra corriente de intelectuales que se inclinaban por el 22 de Mayo de 1764.
Para resolver tal duda, fue creada la “Junta Organizadora del Bicentenario de Ciudad Bolívar”, la cual estuvo presidida por Mons. Dr. Constantino Maradei, quien a su vez delegó en la figura del historiador Hermano Nectario María, la búsqueda de datos precisos que permitieran establecer, la verdadera fecha de la fundación.
Para tal fin, el historiador realizó una revisión minuciosa del Archivo General de Indias y en las secciones denominadas Caracas, Santa Fe, Domingo e Indiferente General, encontró los documentos que nunca obtuvo Tavera Acosta y que daban cuenta de fechas definitivas.
Y, ciertamente, no en vano hubo la confusión con el 19 de Febrero de 1764, pues según se indica la obra de Nectario María esa fecha “es sólo el inicio de los trabajos mientras que el 22 y 23 de mayo, marcan su fin, la bendición oficial y el del primer documento emitido en la nueva población”.
Indica el Hno. Nectario María en su investigación que “el Coronel Joaquín Moreno de Mendoza se trasladó a Angostura en Mayo de 1764 y que el Fuerte San Gabriel, que centralizaba entonces la administración de la nueva ciudad, principiado el 5 de marzo, se terminó el 21 de mayo y que el 22 de mayo de 1764 fue inaugurado solemnemente y bendecido por Fray Bruno de Barcelona en presencia de todos los vecinos, entre pabellones y estandartes con el Gobernador Joaquín Moreno de Mendoza, presidiendo los actos que marcaban el fin del traslado de Santo Tomé de Guayana a la Angostura del Río”.

Fundación y traslados
Lo que hoy conocemos como Ciudad Bolívar, más allá del espacio geográfico que ocupa y que ha ocupado a través de los tiempos, se fundo con el fin de ser la Capital de la Provincia de Guayana en los tiempos de la colonia y hoy continua siendo la capital.
Documentos históricos reseñan que la Capital de la Provincia de Guayana fue fundada, por primera vez en 1531 con el nombre de Santo Tomás de la Guayana, por Diego de Ordaz, militar y explorador español. No obstante, Tavera Acosta señala en su texto Anales de Guayana, que la primera persona en llegar y fundar la primera sede fue el español Juan González de Sosa, por disposición de Ordaz, quien llegó al lugar pocos días después en su remontada por el Orinoco hasta la confluencia del Meta.
No obstante, Tavera Acosta señala que el lugar en el que estuvo situada la primera capital “a orillas casi de la boca del Caroní, entre la actual población de San Félix y la mencionada boca” ya era un lugar poblado, era una ciudad “habitada por indios uayanos, que vivían en míseras churuatas”.
Igualmente, Tavera Acosta cita a los autores Oviedo y Valdés y a su obra “Historia General de Indias”, quienes indican que “la población tenía doscientos buhíos redondos e grandes (…) Aruacay se llamaba el pueblo del cacique Uriaparia y además habían nueve caciques, entre los cuales Naricagua era el principal a quien todos obedecían”.
Desde 1537 y hasta 1590, no se poseen datos históricos de hechos ocurridos en la primera capital. Tavera Acosta asegura en su obra que, luego de esto sólo existe un registro en 1560 donde “sólo Juan de Castellanos en sus Elegías de Varones Ilustres de Indias de 1589, dice que después de las jornadas de Ordaz, salió de Margarita el padre Ayala y llegó hasta donde aquellos invernaron, siendo en1560 muerto por los indios junto con los doce compañeros de que constaba su expedición”.
La segunda Santo Tomás de la Guayana fue fundada por Antonio de Berrío en 1593 “siete leguas más abajo de donde estuvo la primera en la boca del Caroní” señala Tavera Acosta en su libro Anales de Guayana. Esta segunda ciudad fue incendiada por ingleses el 28 de enero de 1618, por lo que fue necesario su traslado, fundándose en 1619, la tercera Santo Tomás de la Guayana.
La tercera capital fue fundada por Fernando de Berrío y padeció durante muchos años el ataque de corsarios y piratas; el Hermano Nectario María, señala en su libro “Fundación de Angostura en 1764 por el Coronel Joaquín Sabas Moreno de Mendoza”, que la decisión real de mudar la ciudad a la Angostura del Orinoco se debió a los constantes ataques “Santo Tomás de la Guayana fue destruida y saqueada a las repetidas ocasiones “por lo holandeses en 1629 y 1637; por los ingleses en 1664, por los holandeses otra vez en 1679; por los franceses en 1685 y por los ingleses en 1740”.
Finalmente, el 22 de mayo de 1764 quedó fundada la Angostura del Orinoco, luego de haber sido ordenado el traslado de Santo Tomás de la Guayana a esa región, para mantenerse en ese lugar los últimos 251 años y llamándose desde 1846 Ciudad Bolívar, capital del Estado Bolívar.

Angostura hoy
Ciudad Bolívar, según se relata en la historia, tuvo un inició muy trágico, complejo, marcado por traslados, incertidumbres y sangrientos enfrentamientos. No obstante, es una localidad que tienen en sus calles y paisajes historias para contar, historias para vivir y también historias para progresar.
Es la capital del estado más extenso, con gran cantidad de riquezas naturales, que inclusive surte a otras ciudades de Venezuela y también de países vecinos.
Conocer su historia, a sus personajes y saber cómo llegamos hasta donde estamos, serán los aspectos fundamentales para hacernos pisar tierra firme y luego despegar con todos los hierros hacia un viaje de constante evolución.
Hoy Ciudad Bolívar no lucha contra los corsarios, lucha contra el desánimo de sus ciudadanos, quienes parecen haberse entregado a lo que va contra la naturaleza prospera y progresista de una ciudad que, pese al descuido, sigue siendo la más bella, la más importante y en la que resulta más gratificante vivir.
Una ciudad la hace su gente y todos formamos parte de lo que hoy compartimos, en este aniversario aprovechemos la oportunidad de reflexionar y tomar decisiones que nos integren a una mejor vida en nuestra Ciudad Bolívar.